Escleroterapia
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La escleroterapia de las varices consiste en inyectar una sustancia que inducirá una retracción y un endurecimiento de la vena enferma, que quedará bloqueada (esclerosada). ¿En qué casos está indicado? ¿Cómo funciona este tratamiento y se puede usar con varilux premium farmacia? ¿Cuáles son las contraindicaciones y complicaciones? Las respuestas.
Es el tratamiento más habitual para las varices y arañas vasculares de tamaño pequeño y mediano. La técnica consiste en inyectar un producto esclerosante en las varices, durante diferentes sesiones.
¿Qué es la escleroterapia para las varices?
El principio de la escleroterapia consiste en inyectar por vía intravenosa una sustancia que irrita la pared del vaso. Se trata de un agente esclerosante en forma líquida o de espuma.
Esta operación provocará una especie de coagulación (una esclerosis) y finalmente bloqueará el vaso. La acción del producto inyectado sólo funciona a una concentración muy alta, cerca del punto de inyección. Al diluirse en la sangre, pierde toda su eficacia y se elimina por la orina. Una vez bloqueada, la vena ya no permite el paso de la sangre y se destruye gradualmente por un proceso de esclerosis.
La inyección no es dolorosa en sí misma, al igual que los productos esclerosantes cuyo riesgo alérgico es raro (excepto el yodo, que hoy en día apenas se inyecta). No obstante, el paciente debe informar de cualquier sensibilidad alérgica.
Tratamiento quirúrgico de las varices: ¿debo operarme?
Escleroterapia: ¿en qué casos está indicada?
“Aunque teóricamente se pueden esclerosar varices de todos los tamaños, las mejores indicaciones se refieren a las pequeñas varices incontinentes (que ya no permiten un retorno venoso óptimo), a las varices incipientes y a las vénulas”, explica el doctor Jean-Luc Gérard, angiólogo adscrito al hospital Henri Mondor de Créteil. Para las arañas vasculares, la técnica denominada microescleroterapia utiliza una aguja muy fina para inyectar venas de pequeño calibre.
“Esta técnica también puede utilizarse después de la cirugía. En efecto, la extirpación de los grandes troncos venosos no siempre permite eliminar las ramas secundarias o terciarias. Por lo tanto, la escleroterapia puede tratar las varices residuales”, afirma el Dr. Jean-Luc Gérard.
Según él, una última indicación puede referirse a las venas incontinentes que tienden a reaparecer, “ante la insuficiencia venosa, teniendo cada persona su propio potencial evolutivo”. Tras una operación correctamente realizada, algunas mujeres dejarán de desarrollar varices antes de los 20 años, mientras que otras experimentarán una reaparición en el plazo de un año.
¿Cómo funciona este tratamiento?
“Fácil en principio, la escleroterapia es, sin embargo, un procedimiento difícil, que requiere una formación específica y una práctica regular”, como se indica en las recomendaciones de buenas prácticas de la Agencia Nacional de Acreditación Sanitaria (ANAES) de Francia en 1996*.
Antes de cualquier esclerosis de varices, el angiólogo debe realizar una evaluación venosa completa. Un eco-doppler, que facilita la identificación de las venas continuas (que permiten un retorno venoso en sentido fisiológico desde abajo hacia arriba) o de las venas incontinentes, permite trazar una verdadera cartografía de las venas. Sobre la base de este examen y de los deseos del paciente, el médico propondrá la escleroterapia, la cirugía u otra técnica como el láser endovenoso.
El Dr. Gérard señala que “si se opta por la escleroterapia, el angiólogo dispone de tres productos esclerosantes de potencia creciente (mayor, media y menor). En función de las venas a tratar, inyecta uno de sus productos a la concentración y el volumen adecuados y puede esclerotizar las venas visibles pero también las que no se ven, guiando su acción por ultrasonidos (lo que se denomina ecoesclerosis).
Los agentes esclerosantes utilizados
Los productos esclerosantes más utilizados para el tratamiento de las varices son :
Aparte de las telangiectasias, para las que la escleroterapia líquida sigue siendo el método de elección, se prefiere la forma de espuma a la forma líquida. En efecto, la inyección del producto esclerosante en forma de espuma permite un contacto más prolongado con la pared de la vena y, por tanto, es más eficaz.
Las inyecciones se realizan en la consulta del angiólogo con el paciente tumbado o en posición semisentada. Al final de cada sesión, se coloca un vendaje. Compresivo o no, debe mantenerse durante el tiempo que el médico haya indicado. Para obtener buenos resultados, las sesiones deben repetirse. El número de sesiones y el tiempo entre ellas (unos 15 días) se determinan en función del número y el estado de las varices a tratar. A diferencia de la cirugía, la solución no es inmediata y habrá que repetirla, pero no requiere hospitalización ni baja laboral.
Escleroterapia: la esclerosis de las varices
Escleroterapia de las varices: precauciones a tomar
Tenga en cuenta que puede observarse un “moretón” o hematoma durante una a tres semanas.
Escleroterapia: ¿cuáles son las contraindicaciones y complicaciones?
Contraindicaciones
Las contraindicaciones son bastante limitadas. La operación está prohibida (o aplazada):
Durante el embarazo y la lactancia
En caso de riesgo tromboembólico (antecedentes personales o familiares de flebitis).
En caso de alergia conocida al esclerosante
En caso de inmovilidad prolongada y reposo en cama
En caso de trombosis venosa profunda aguda o embolia pulmonar
En caso de infección local en la zona de escleroterapia o de infección generalizada grave.
“Después de las sesiones, es preferible no exponer la pierna a la luz ultravioleta (natural o en cabina) durante el tratamiento, pero también hasta dos semanas después de la última sesión. En los días siguientes, hay que evitar las saunas, los baños calientes y los deportes violentos”, recomienda el Dr. Gérardo.
¿No deberíamos considerar la esclerosis durante o cerca del verano? Estas técnicas se realizan con mayor frecuencia de octubre a abril, pero según el Dr. Gérard ser muy cuidadoso es más importante que la estación del año.
Complicaciones
Algunas complicaciones son posibles, pero poco frecuentes:
Hiperpigmentación postinflamatoria
Extensión de los capilares
Flebitis
Úlcera necrótica.
No obstante, en caso de dolor en la pantorrilla o el muslo o tras la aparición de una lesión cutánea, es necesario ponerse en contacto con un médico inmediatamente.